8 sencillos trucos para una Navidad más saludable

8 sencillos trucos para una Navidad más saludable

Estamos a menos de dos semanas de Navidad, y desde Menudiet queremos recordaros la importancia de mantener unos hábitos saludables también en estas fechas tan señaladas.

No nos engañemos, objetivos de pérdida de peso o mejorías notables en la composición corporal quizás deban esperar, pero eso no quiere decir que optemos por dejar de pensar del todo en nuestra salud.

Permitirnos un bombón sin culpa es saludable, forma parte de una buena relación con la comida si en estos días estamos rodeados de familia, amigos y tentaciones. Sin embargo, comernos la bandeja entera pensando en no probar dulce alguno en los próximos tres meses dista mucho del concepto de salud.

Nuestro organismo no va a responder igual si consumimos de forma moderada comidas más energéticas, palatables y ricas en grasas y azúcar de lo que solemos tender a escoger, que si las consumimos en cantidades excesivas.

Buscar equilibrio en todos los sentidos nos garantizará no tener que llevarnos las manos a la cabeza en enero, no haber acabado con nuestra salud digestiva y no haber dañado nuestra microbiota intestinal por exceso de alcohol o de comida poco nutritiva pero altamente calórica.

Así que, ¿por qué no seguir nutriéndonos correctamente en diciembre?

El hecho de mantener una adecuada alimentación los días no festivos, nos ayudará en gran medida a evitar la ansiedad y a preservar con ello nuestra salud intestinal además de nuestra salud general.

Y es que no cenas igual habiendo malcomido que habiendo tomado un plato rico y saciante aunque sea bajo en calorías.

Si este mes tu tiempo escasea aún más que de costumbre, ayúdate de conservas saludables de verduras (alcachofas, judías verdes, etc.), platos de calidad congelados como los que te ofrecemos en MenuDiet, o ensaladas llenas de color, facilitándonos un buen aporte de antioxidantes, vitaminas y fibra en cada bocado. Sin olvidar que el resto de la comida sea equilibrada, rica en proteínas, y con grasas tan beneficiosas como el aceite de oliva virgen extra.

¡Que el tiempo no sea una excusa! Cuidarte no es una opción, haz de ello un hábito, y que los pequeños excesos se queden en lo que son, días de compartir, disfrutar y probar alimentos que no consumes en otras épocas del año. No es el mes del abandono, es el mes de cerrar el año, de seguir queriéndonos y por ello de seguir mimándonos.

Os dejamos algunos de nuestros 8 consejos favoritos para que sea más sencillo seguir cuidándonos en Navidad:

  • No te olvides del agua. Si consumes otras bebidas, alterna su consumo con agua. Y haz de esta última tu opción prioritaria. Siempre puedes saborizarlas con frutas, pepino o utilizar agua con gas para darles un toque diferente y especial.

  • Los postres siempre compartidos, y si en la mesa hay opciones con fruta, mejor que mejor!

  • No descuides la verdura. Hazla partícipe de todos los eventos navideños. Piensa platos diferentes, atractivos y ricos, que aseguren su aceptación estos días. Ensaladas con granada, lombarda con pasas y piñones, brochetas de verduritas con mostaza...

  • Incluye mejillones, berberechos, pulpo, langostinos, además encurtidos como pepinillos en los aperitivos. Evita a la vez alimentos ultraprocesados como puedan ser unas patatas fritas "de bolsa" para acompañar estos platos. En esa línea, ¡es mucho mejor tomar un mejillón con un trocito de pan de calidad, o tomártelo solo!

  • Escoge granos integrales. Que sea diciembre no quiere decir que el pan que tengamos que poner en la mesa no sea demasiado saludable. Prioriza granos integrales y cereales de mejor calidad como el centeno, la espelta, o el trigo sarraceno... más ricos, más nutritivos y, sobre todo, más saciantes.

  • Elige preferentemente platos principales con carnes magras o pescados. En cuanto a las guarniciones, mejor al horno o asadas (como unas patatas horneadas con cebolla) que fritas. Y a poder ser con un extra de verduras.

  • Si puedes, haz tus propias versiones saludables de dulces navideños, reduciendo con ello en gran medida la cantidad de azúcar y grasa que éstos aportan. Si no, sencillamente ten en cuenta que su consumo debe ser comedido y no diario. Tener una bandeja de turrones esperándonos en el salón cada vez que pasamos desde el 1 de diciembre no es buena idea. Reserva estas bandejitas para los días en los que vayas a recibir invitados, haciendo un consumo consciente y esporádico.

  • ¡Disfruta! El año se acaba, y empieza otro lleno de retos, oportunidades y 365 días en los que una buena alimentación nos puede ayudar a tener una vida mucho más plena.

Nosotros como siempre aquí estamos para asesorarte y ayudarte en lo que necesites. ¡FELICES FIESTAS!