Kale, la col rizada americana

Kale, la col rizada americana

Esta semana os vamos a hablar del famoso Kale, una verdura que se ha puesto muy de moda en los últimos meses y a la que se le están otorgando propiedades casi mágicas para la salud. ¿Será realmente un súperalimento? Vamos a verlo:

En primer lugar, hay que aclarar que el Kale (cuyo nombre científico es Brassica oleracea var sabellica) es la col rizada de toda la vida y por tanto no estamos ante el descubrimiento de un nuevo alimento.

Las propiedades del Kale son tremendamente similares a las del resto de coles (brócoli, berza, coles de Bruselas, repollo…) y aunque esta familia tiene unas propiedades estupendas para nuestra salud si las tomamos dentro de una dieta equilibrada y variada, podemos afirmar que el Kale no tiene nada de especial comparado con el resto de coles.

Como ocurre con todos los tipos verduras y hortalizas, su presencia en la dieta es importante para aportarnos sobre todo vitaminas, minerales y fibra. Pero cada tipo nos va aportar unas cantidades diferentes de estos nutrientes, además de sustancias propias de cada una de ellas que las hacen únicas. En el caso de las coles sobre todo hay que destacar su alto contenido en:

  • Vitamina K: esencial para una buena coagulación.
  • Ácido fólico: importantísimo durante el embarazo y la lactancia.
  • Vitamina A: función antioxidante y papel importante en la salud ocular.
  • Vitamina C: potente antioxidante.
  • Hierro: tiene alto porcentaje pero su absorción no va a ser tan alta como en los alimentos de origen animal, donde el hierro se presenta de una forma más biodisponible.
  • Calcio: su cantidad es representativa pero no lo suficiente para cubrir las necesidades diarias de este mineral. Esto es debido a la presencia de oxalatos y de la fibra que impiden su total absorción.
  • Glucosinolatos: son compuesto azufrados presentes en las coles, rúcula, nabo, mostaza… los cuales se ha demostrado que tienen un papel protector para la prevención de muchos tipos de cáncer.
  • Fibra: fundamental para mantener la flora intestinal sana, la cual garantiza un sistema inmune fuerte.

Como veis el Kale, al igual que el resto de alimentos de la familia de las coles, tiene una composición muy interesante desde el punto de vista nutricional pero hay que recalcar que no existen “superalimentos” que den solución a un problema de salud o a adelgazar más rápido.

Además, es importante alertar de que el abuso de cualquier alimento (incluidos los más saludables) también puede traer consecuencias negativas, por lo que no es recomendable seguir las modas e introducir en nuestra dieta un alimento de forma “masiva” o exagerada. Con tomar coles un par de días a la semana es suficiente para aprovechar sus propiedades pero no conviene tomarlas a diario, ya que en este caso concreto no podemos perder de vista de cualquier alimento de la familia de las brasicáceas o crucíferas (como son las coles y por tanto el Kale) tomado en exceso y especialmente en personas con problemas previos, pueden alterar el correcto funcionamiento de la glándula tiroides.