Lactancia materna

Lactancia materna

Esta publicación es complementaria al artículo en el que hablábamos sobre la leche materna.

Beneficios de la lactancia materna

  • El niño se adapta mejor a los nutrientes que contiene la leche materna que son fácilmente digeribles para su tracto intestinal y además, existe menos riesgo de sobrealimentación.
  • Favorece el desarrollo de la flora microbiana banal de su tracto digestivo.
  • La leche presenta componentes inmunológicos que previenen las infecciones del bebé a corto y largo plazo y a varios niveles.
  • Existe menor riesgo de que el niño desarrolle alergias, algo que al igual que el punto anterior, se relaciona con un mejor desarrollo y funcionamiento del sistema inmunológico.
  • Mejora el desarrollo psicomotor del pequeño, así como la correcta maduración de todos los sistemas y aparatos de su cuerpo.
  • Facilita el desarrollo mandibular y dental adecuado.
  • Mejora el crecimiento y el desarrollo tisular (de los tejidos).
  • Fuertes lazos entre madre e hijo.

Consejos sobre la lactancia materna

Eliminar temporalmente de la dieta los alimentos que puedan alterar el sabor de la leche: Alcachofas, coles, rábanos, grandes cantidades de ajo y cebolla crudos, así como especias picantes e irritantes como curry, tabasco o salsas con chile.

Beber agua, leche y zumos en mayor cantidad: El aumento de ellos en la dieta de la madre no está relacionado con una mayor producción de leche materna, pero no podemos perder de vista que es tremendamente importante beber mucha agua y alimentos jugosos para mantener el equilibrio de líquidos en la mujer. Con la lactancia materna se corre mayor riesgo de deshidratación debido a la producción de leche.

Usar técnicas culinarias sencillas bajas en grasa: La mujer lactante debe llevar una dieta equilibrada densa en nutrientes pero moderada en grasa, evitando así digestiones pesadas y la posible aparición del sobrepeso.

Evitar bebidas excitantes: Incluso las pequeñas cantidades de cafeína pueden pasar a la leche y de ahí al niño, pudiendo provocar irritabilidad del bebé y problemas de sueño.

No fumar: La nicotina pasa a la leche con gran facilidad y en cantidades significativas. Además, en madres fumadoras el periodo de producción de leche se ve notablemente reducido.

No beber alcohol: Los niveles de alcohol en sangre son casi iguales que los niveles en la leche, por lo que si la madre bebe alcohol el bebé también lo va a ingerir. Ocasionalmente, se puede tomar una pequeña copa de vino, al menos dos horas antes de darle el pecho al bebé.

Recuerda seguir estos consejos. Además te recomendamos visitar nuestras dietas para embarazadas o en período de lactancia que ofrecemos en MenuDiet.